Las marcas deben adaptarse y actualizarse para mantenerse relevantes y competitivas, en un contexto de constante cambio como el actual. Una de las estrategias más efectivas para lograrlo es el restyling, este es un proceso que implica la actualización de la imagen de marca sin alterar su esencia.

Pero, ¿qué es exactamente el restyling y por qué es tan importante? En este artículo, exploraremos en profundidad este concepto, sus diferencias con el rebranding, cuándo es necesario realizarlo y cómo llevarlo a cabo de manera efectiva.

¿qué es el restyling de una marca?

¿Qué es el restyling de una marca?

El restyling es una actualización o «lavado de cara» de la imagen de una marca. Se trata de un rediseño de la marca que se enfoca principalmente a los elementos visuales externos, como el logotipo, la identidad corporativa, el packaging o la página web. Sin embargo, a diferencia del rebranding, el restyling no modifica los valores fundamentales, como podrían ser la misión o la visión de la empresa.
El restyling es en realidad una forma de adaptarse a las nuevas tendencias, gustos y necesidades del público, pero sin perder la esencia de la marca.

Un ejemplo destacado puede ser Burger King, quien recuperó su logo clásico para conectar con la nostalgia de sus consumidores, de este forma mantiene su identidad pero la reactualiza.

Diferencias entre restyling y rebranding

Aunque restyling y Rebranding suponen cambios en la imagen de una marca, existen diferencias:

Restyling: está enfocado en cambios de orden cosmético, como puede ser el diseño del logo, los colores corporativos o la tipografía. No modifica los aspectos medulares de la marca (valores, misión, visión).

Rebranding: es un proceso de cambio más profundo que implica un cambio total en la identidad de la marca, incluyendo su filosofía, valores y estrategia de comunicación. Un ejemplo puede ser cuando una marca decide cambiar su público objetivo o su área de negocio. Rebranding sería el caso de una empresa que pasa de vender productos físicos a enfocarse exclusivamente en el comercio electrónico, modificando no solo su imagen, sino también su propuesta de valor.

 

¿por qué hacer restyling?

¿Por qué es necesario el restyling?

Las marcas no existen per se; están influenciadas por cambios sociales, tecnológicos y culturales. Veamos cómo el restyling se aplica a una marca:

1.Adaptación a las tendencias: los gustos y preferencias de los consumidores evolucionan. Un restyling permite a las marcas mantenerse actualizadas y conectadas con su público.
2.Rejuvenecimiento de la imagen: con el tiempo, algunas marcas pueden parecer obsoletas. Un restyling ayuda a refrescar su imagen y atraer a nuevas generaciones.

3.Relanzamiento de productos: cuando una marca relanza un producto, un restyling puede darle nueva vida y aumentar su visibilidad.
4.Cambios en la estrategia: si una empresa modifica su enfoque de negocio, un restyling puede ayudar a alinear su imagen externa con su nueva dirección.

5.Fusiones o cambios de propiedad: en casos de fusiones o adquisiciones, un restyling puede reflejar la nueva etapa de la empresa.

¿Cuándo hacer un restyling?

No existe un momento exacto para plantearse realizar un restyling, porque cada marca tiene necesidades específicas. Sin embargo, hay situaciones comunes que suelen ser ideales para llevar a cabo este proceso:

– Relanzamiento de un producto: es el momento perfecto para darle un nuevo aspecto a un producto y recuperar su relevancia en el mercado.
– Obsolescencia del branding: cuando la imagen de marca ya no conecta con el público, es hora de actualizarla.
– Cambio de titularidad: si una empresa cambia de propietario o incorpora nuevos socios, un restyling puede ayudar a reforzar su nueva identidad.
– Nueva estrategia de marca: si la estrategia de la empresa evoluciona, su imagen debe reflejar ese cambio.

Restyling y rebranding

¿Cómo realizar un restyling efectivo?

Aunque el restyling es una modificación esencialmente de aspectos visuales de la marca, debe realizarse bajo una estrategia bien planificada. Veamos algunos pasos clave para realizarlo correctamente:

  1. Auditoría de marca: analiza la imagen actual de tu marca. ¿Qué elementos funcionan y cuáles necesitan actualizarse? ¿Transmite actualmente los valores de tu empresa?
  2. Define objetivos: ¿qué quieres lograr con el restyling? Ya sea rejuvenecer la imagen, atraer a un nuevo público o alinearte con una nueva estrategia, es crucial tener metas claras.
  3. Conoce a tu público: el restyling debe resonar con tu audiencia objetivo. Investiga sus preferencias y comportamientos para crear una conexión emocional.
  4. Elige el momento adecuado: aprovecha momentos significativos, como aniversarios o lanzamientos, para darle mayor impacto al restyling.
  5. Trabaja con profesionales: un restyling exitoso requiere experiencia en branding y diseño. Colabora con expertos para garantizar que el proceso sea coherente y efectivo.

Ejemplos de restyling exitosos

Ejemplos de restyling exitosos

Algunas marcas han logrado reinventarse a través del restyling, manteniendo su esencia pero adaptándose a los nuevos tiempos:
Airbnb: cambió su logo para reflejar sus valores fundamentales: lugares, personas, amor y empresa.
Instagram: en 2016, adoptó un diseño más minimalista, simbolizando una comunidad global y moderna.

Reebok: actualizó su logo para enfocarse en un público más joven y activo, utilizando el delta como símbolo de transformación.

En resumen, el restyling es una herramienta poderosa para mantener tu marca vigente, activa y conectada con su público. A diferencia del rebranding, su aplicación no implica un cambio radical en la esencia de la empresa, sino una actualización de su imagen externa. Ya sea para adaptarse a nuevas tendencias, rejuvenecerse o relanzar un producto.

El restyling es una estrategia que, bien ejecutada, puede potenciar la identidad de tu marca y fortalecer su posición en el mercado.

Si estás considerando realizarlo, recuerda que es un proceso que requiere planificación, conocimiento del público y, sobre todo, una visión clara de los objetivos que deseas alcanzar.

Este tipo de procesos es conveniente realizarlos de la mano de una agencia de marketing digital (en el caso que sea una marca en línea), o de una agencia de marketing especializada en branding que sabrá capitanear el proceso de actualización de tu marca y ponerla al día.